Ante un escenario simulado, personal del hospital Monseñor Sanabria se enfrentó a un terremoto y condiciones críticas para llevar a cabo el ejercicio planteado por el CAED. ·
Capacidad de organizar el trabajo bajo presión fue puesto a prueba.·
Ruido de sirenas de ambulancia e interrupciones constantes los acompañaron dentro de la Unidad Médica Móvil, como parte del ejercicio.
Este jueves 19, el hospital de Puntarenas recibió al equipo del Centro de Atención de Emergencias y Desastres (CAED) de la CCSS, para realizar un ejercicio práctico en una de las Unidades Médicas Móviles instaladas en este centro médicoy poner en práctica el conocimiento y destrezas de tres equipos de trabajo conformados por funcionarios de los servicios de enfermería, medicina, brigadistas, nutrición, mantenimiento, aseo y vigilancia, ante una eventual situación de emergencia, adicional a la atención de la pandemia por COVID-19.
Para dicho simulacro, la realidad a que se debían enfrentar los equipos de trabajo fue llevada al límite: un terremoto de 8.5 grados en la escala de Richter, servicios básicos suspendidos, carreteras principales inhabilitadas, la estructura física del hospital totalmente fuera de servicio, así como hospitales y centros médicos cercanos. El panorama descrito buscaba valorar la capacidad de respuesta de los equipos al resolver una situación de emergencia con una Unidad Médica Móvil Nivel 1 Fijo, certificada con los estándares y protocolos de la Organización Mundial de la Salud.
Una Unidad Médica Móvil Nivel 1 Fijo, se puede adaptar para brindar atención de emergencias, clasificación,observación, estabilización, referencia, sala de partos, salade espera, toma de muestras de laboratorio. Además, es autosuficiente, esto quiere decir que, en caso necesario, mediante una planta eléctrica que funciona con diesel puede brindar electricidad, cuenta también con un sistema especial que puede filtrar agua de lluvia o de río para purificarla y hacerla apta para procedimientos y consumo humano.
Al inicio de la práctica, se les brindaron tres minutos para readecuar mediante la elaboración de un plano, la organización de las Unidades Médicas Móviles (carpas que se encuentran ubicadas en las afueras del hospital), transcurrido el tiempo, empezaron a narrarse las condiciones de la emergencia, además se escuchaba el sonido de sirenaspara ambientar la situación; mientras tanto una a una erannarradas las condiciones de los supuestos 20 pacientes que iban llegando para ser atendidos, adicionalmente, los equipos debían atender, de forma simulada a una autoridad del Ministerio de Salud, que les hacía preguntas sobre los distintos procedimientos que se encontraban realizando y un supuesto periodista que les generaba presión adicional.
Una vez finalizado la práctica, la Ing. Mónica Ingianna Mora del CAED, en conjunto con los funcionarios del hospital Monseñor Sanabria, hicieron la evaluación y revisaron las oportunidades de mejora, para el Lic. Albin Rosales Oses, gestor ambiental del centro médico, la actividad les permite mantenerse actualizados y prevenir posibles escenarios a futuro: “esta actividad nos recuerda por qué debemos estar actualizados, nos permite tener los conocimientos frescos y prevenir acciones a futuro y estar alertas, identificar los recursos actuales y los que se van a necesitar ante una eventual emergencia, también nos deja lecciones aprendidas, para, a lo interno realizar ajustes que permitan garantizar la atención de la salud en cualquier tipo de situación”, puntualizó.
Por su parte la Dra. Cecilia Barrantes Marín, enfermera epidemióloga del HMS, añadió “estos ejercicios son excelentes, como funcionaria del hospital nos queda la tarea de seguirlos replicando, hacer simulacros y prepararnos para cualquier evento que suceda en cualquier momento es vital, este tipo de prácticas nos lleva a un alto nivel de exigencia y estrés, pero al mismo tiempo nos permite salir de la rutina habitual de trabajo, fomenta el trabajo el equipo, el pensamiento crítico y el disfrute en la distribución de las tareas, en la resolución de problemas todos aprendemos”,finalizó la doctora Barrantes Marín
Para las autoridades del hospital Monseñor SanabriaMartínez, es muy importante este tipo de ejercicios de simulación, permiten poner a prueba la capacidad de respuesta de funcionarios, equipos y recursos con que se cuentan, en condiciones muy diferentes a las del día a día, garantizando el acceso a los servicios y la mejor atención a las personas usuarias.