Contribución del 1% sobre facturación mensual en servicios de telecomunicaciones permitirá balancear la situación actual y mejorar la capacidad operativa de los Comités Auxiliares.
Recursos serán utilizados en atención pre hospitalaria, contratación de personal para ambulancias y de 317 nuevos socorristas para todas las regiones.
Reforma busca compensar la disminución de ingresos que ha experimentado la Cruz Roja a raíz de la pandemia.
“La Benemérita cumple una cantidad de funciones esenciales en el manejo de la atención de las emergencias, así como en el rescate y búsqueda de personas desaparecidas, en la atención integral de los desastres y de asistencia humanitaria”, expresó Alexánder Solís, presidente ejecutivo de la CNE.
San José. El presidente de la República, Carlos Alvarado Quesada, firmó este lunes la reforma a la Ley 8690 “Creación de la contribución parafiscal al servicio de la telefonía móvil y convencional, prepago, postpago o cualquier otra modalidad de telefonía destinada al financiamiento de la Asociación Cruz Roja Costarricense”.
La reforma establece la contribución de un 1% sobre la facturación mensual en los servicios de telecomunicaciones disponibles en el país.
El acto de firma se realizó en Casa Presidencial, con la asistencia de la diputada de la República, Ana Karinne Niño, el presidente de la Comisión Nacional de Emergencias y Prevención de Riesgos, Alexánder Solís y el presidente de la Cruz Roja Costarricense, Glauco Ulises Quesada.
“Agradecemos profundamente al Poder Legislativo y Ejecutivo por todo su apoyo al impulsar y aprobar esta Ley que fortalece nuestro mandato humanitario. Nos corresponde ahora a los y las cruzrojistas honrar esa confianza, dando lo mejor para continuar construyendo una sociedad nacional ejemplar”, comentó Quesada.
Precisó que la reforma permitirá balancear la situación actual y fortalecer la capacidad operativa de los Comités Auxiliares. Los ingresos serán utilizados en la atención pre hospitalaria, con la contratación de personal para tripular las ambulancias y seguir prestando auxilio según el Reglamento de Atención Extra Hospitalaria de Pacientes y de 317 nuevos socorristas para todas las regiones.
“En el caso de Costa Rica, la Benemérita cumple una cantidad de funciones esenciales en el manejo de la atención de las emergencias, así como en el rescate y búsqueda de personas desaparecidas, en la atención integral de los desastres y de asistencia humanitaria”, expresó Alexánder Solís, presidente ejecutivo de la CNE.
Desde el inicio de la pandemia por la COVID-19 disminuyeron los ingresos provenientes de transferencias de los fondos públicos, así como de fondos privados debido a la restricción de realizar eventos masivos y medidas sanitarias, actividades que constituyen uno de los principales componentes de financiamiento de la Institución.
La atención de la emergencia sanitaria ha requerido de la Cruz Roja Costarricense un total de 30.111 incidentes relacionados con la COVID-19, 4.307 traslados de casos sospechosos, y la inversión de más de 120 millones de colones.