Franklin Castro Ramírez
El video fue una muestra de amor y confianza, nada del otro mundo. Aunque luego han surgido otras causas para el despido de la Viceministra de la Juventud Karina Bolaños, la sensación que quedó en el ambiente es que la separación fue más por la divulgación del video íntimo. Curiosamente es el Gobierno que ahora da detalles de otras irregularidades, casualmente para evitar afectar su imagen por la forma en que manejó el caso.
En otros temas jamás entregan información de cuestionamientos y más bien hasta evitan ahondar en los mismos. Respecto al video, creo que el accionar oficial respecto al mismo, es más una muestra de puritanismo con el que la sociedad costarricense mucha veces oculta su doble moral. Sinceramente nos extrañó que la Presidenta de la República (siendo mujer), no se haya solidarizado con la afectada. No hubo espaldarazo, solo le dio la espalda.
Ver a la Presidencia actuar sin ambivalencias frente a este caso, me pareció en cierta manera hasta fuera de contexto, pues en situaciones que realmente afectan al país, la mandataria se ha mostrado indiferente. Pregunto: ¿En qué nos afecta a la sociedad costarricense y al mundo, el que veamos a una Viceministra en ropa interior, enviando un mensaje de amor al ser que ama?.
Nos inquietan eso sí los gastos desmedidos del Gobierno, la falta de controles y de fiscalización en las obras que se hacen, en donde como hemos visto, algunos hacen la fiesta y todos tenemos que pagarla.
Quisiera ver a esa Presidenta firme y honesta, reprendiendo y pidiendo las cabezas de esos que no cumplen con sus funciones y que con su accionar, lesionan la confianza que en las urnas la mayoría depositaron en este gobierno. Por supuesto que si la exviceministra cometió faltas en su gestión y de afectación a otras personas (supuesto acoso, por ejemplo), debe hacer frente a sus errores y pagar las consecuencias.
Pero lo del video, pertenece al ámbito privado y si salió a la luz pública, fue porque algún desalmado lo expuso con la única intención de dañar su integridad. Un hombre que actúa así, merece los más bajos conceptos. Incluso aquellos incluidos en la no tan agradable canción de Paquita la del Barrio, se quedan cortos para describirlo.
El video fue una muestra de amor y confianza. Nada del otro mundo, sus palabras fueron cuidadas y su pose sensual, sin sobrepasar los límites del decoro. No mostró nada de más. Para mi concepto, la exviceministra se vio muy sensual en lencería blanca. No quiero sonar machista, pero creo que talvez si hubiésemos tenido un Presidente hombre, todavía estuviera en su puesto. Al menos a nosotros, no nos asuntan los trapos íntimos.
Nota aparte: Mostró más Miriam González en el programa televisivo Combate, cuando en horario familiar se le vieron los senos completamente desnudos. Fue accidental, por lo que no fue su culpa y tampoco es para escandalizarse. Ya nos dimos cuenta, que la chica está muy bien diseñada en sus medidas superiores.