En vacaciones de medio año
El cantón de Turrialba, un encantador valle rodeado de montañas y cataratas, es el destino perfecto para aprovechar las vacaciones de medio año.
Para la Cámara de Turismo de Turrialba (CATUR), este destino ruralmente auténtico ofrece la facilidad de estar a tan solo dos horas de San José y es una posibilidad accesible tanto para quienes buscan una estancia prolongada como para los que prefieren un tour de un día.
“La Cámara de Turismo de Turrialba (CATUR), con el apoyo del Instituto Costarricense de Turismo (ICT), está uniendo esfuerzos con el fin de promover y fortalecer al cantón como un destino inigualable por la variedad de atractivos que ofrece al visitante», expresó Julio Cesar Gamboa, presidente de CATUR.
Desde las imponentes cataratas hasta el majestuoso Volcán Turrialba, este cantón invita a explorar su patrimonio histórico como los templos de Colorado, La Pastora, Aquiares, la Antigua Estación de Trenes de Peralta y del Ferrocarril al Atlántico.
Aquí, el verdor inspira paz y tranquilidad, mientras que los quetzales, los colibríes y la garza del sol añaden un toque mágico a su visita.
Turrialba es ideal para el ciclismo de montaña y el senderismo, con rutas que desafían tanto a principiantes como a expertos. Para los amantes de la adrenalina, está el río Pacuare, considerado uno de los mejores lugares del mundo para practicar rafting, ofreciendo la emoción de descender por rápidos de clase mundial en un entorno natural impresionante.
Más allá de su belleza natural, Turrialba es un lugar lleno de cultura y tradiciones. Los visitantes pueden sumergirse en la historia al visitar el Monumento Nacional Guayabo, el sitio arqueológico más importante de Costa Rica, y participar en festividades locales que celebran la rica herencia cultural del área.
La rica cosecha de las fértiles tierras de Turrialba, que incluyen productos como tubérculos, leche, caña de azúcar, café y pejibaye, la que da lugar a una gastronomía que fusiona ingredientes frescos con recetas influenciadas por diversas culturas. Entre los platillos más destacados se encuentran el “rice and beans”, la olla de carne, la crema de pejibaye, las chancletas, el pozol, el queso Turrialba, y el sabroso chicharrón de queso. En este destino ruralmente auténtico, puede disfrutar también de una tortilla de queso con natilla y un trozo de queso Turrialba, un plátano maduro con queso y disfrutar de un humeante jarro de café.
La hospitalidad de los habitantes de Turrialba es inigualable. Esta tierra con hombres y mujeres agricultoras, artistas y poetas cuenta con más de 600 camas distribuidas en alrededor de 40 sitios de hospedaje en toda la zona. Los alojamientos van desde acogedoras posadas hasta lujosos eco-lodges, todos comprometidos con la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente.
Ubicado a solo dos horas de San José, Turrialba es fácilmente accesible para los turistas nacionales e internacionales. El compromiso con el turismo sostenible se refleja en las prácticas responsables y en la conservación de sus recursos naturales, garantizando que las generaciones futuras también puedan disfrutar de este paraíso terrenal.
Turrialba, un destino que combina la belleza natural, la aventura y la cultura, ofrece una experiencia inolvidable para los visitantes de todas las edades. No importa la época del año, siempre tiene algo especial que ofrecer.
Descubra Turrialba, un verdadero tesoro escondido en Costa Rica que combina historia, naturaleza y sabores únicos para su paladar. ¡Turrialba le espera para unas vacaciones de medio año inolvidables!.
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