- Encuentre su forma personal de bajar de peso; tome en cuenta factores físicos, hereditarios, hormonales y sus respectivas metas
- Especialista en Nutrición del Hospital Clínica Bíblica comparte consejos
Al iniciar el año nuevo, son muchas las personas que buscan bajar de peso con dietas restrictivas o fórmulas “mágicas”, que dan una ilusión temporal de pérdida de kilos, sin embargo, son metas irreales, con cambios que en el tiempo no van a perdurar. Lo cierto es que, “estas ideas necesitan cambiar y la sociedad entender que la pérdida de grasa o peso sostenida debe ir acompañada de un plan personalizado según la condición física del paciente, así como aspectos en su salud que hacen que esto sea distinto para cada individuo”, comenta la nutricionista Ivonne Umaña, del Hospital Clínica Bíblica.
En definitiva, el aumento de peso que se da durante la temporada de festividades se debe a una sobre ingesta calórica comparado al gasto que normalmente se tiene, esto crea un exceso en el cuerpo que se transforma en grasa y como consecuencia en aumento en las tallas.
La Dra. Umaña hace énfasis en estos 3 importantes puntos con el fin de llegar a la meta deseada:
- Buscar un profesional de la salud: Éste le ayudará a establecer una alimentación saludable que permita tener un déficit calórico según sus necesidades. Acompañado a esto, es importante tener un plan de actividad física que permita a la persona perder calorías.
- Establezca metas realistas: Que le permitan bajar grasa de una manera saludable en el tiempo, sin efecto rebote, de manera flexible para evitar la frustración.
- Realice cambios en su estilo de vida: Establezca hábitos nuevos, que pueda cumplir y hacerlos parte de su vida, en este caso, crear la costumbre de la alimentación saludable en comparación con lo que venía haciendo anteriormente. Algunos pueden ser aumentar el consumo de agua, vegetales, y realizar alguna actividad física.
Por otro lado, la experta resalta la importancia de transformar el estilo de vida en un hábito, es decir, poder tener prácticas más saludables sin que sea forzado y se realice de manera natural.
Un hábito se establece cuando por 21 veces seguidas se practica aquella costumbre que se quiere integrar. Además de ser conscientes de las pequeñas cosas que ayudarán a mejorar a nivel físico y de salud.
Es importante tomar en cuenta que la idea no es eliminar los alimentos que ya se disfrutan, ya que se habla de la importancia de la flexibilidad y de tener un equilibro que permita hacer de este camino algo dinámico y positivo.
Algunas costumbres que puede ir adquiriendo desde ya mientras espera su cita con un profesional en nutrición son:
- Mantener el cuerpo hidratado
- Aumentar la ingesta de verduras y vegetales
- Realizar alguna actividad física a diario
- Hacerse chequeos médicos de manera periódica
- Crear una adecuada higiene del sueño
Junto a estos esfuerzos, la doctora recomienda buscar apoyo para sostener estos hábitos y que el cambio pueda ser de adentro hacia fuera.
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