Como parte de las acciones que realiza el Servicio Nacional de Guardacostas a fin de velar por la seguridad de la ciudadanía, tres armas fueron decomisadas y dos sospechosos de portación ilegal de arma permitida fueron detenidos el pasado fin de semana en la península de Nicoya.
El primer caso se registró el pasado viernes en la localidad de Dominicas de Jicaral, distrito de Lepanto, Puntarenas, cuando durante un patrullaje varios oficiales de la Estación de Guardacostas de Puerto Coyote, Nandayure, divisaron a un hombre que llevaba consigo, en plena vía pública, una escopeta 12.
El sujeto, quien es de apellido Villegas, al notar la presencia policial, de inmediato arrojó el arma al suelo y empezó a huir, pero luego fue aprehendido instantes después.
Tras ser identificado, las autoridades determinaron que no poseía ninguna documentación de la citada arma, la cual tampoco presenta inscripción alguna en territorio nacional.
El sábado en la noche, durante un patrullaje similar en la vía que comunica el pueblo de Balso de Jicaral con Cóbano, los guardacostas se toparon con una motocicleta cuyo conductor desobedeció la voz de alto y trató de escapar.
Sin embargo, poco después de realizar una maniobra para evadir la acción policial, la motocicleta derrapó y cayó junto con sus dos ocupantes en una zanja a la orilla del camino, tras lo cual los sujetos arrojaron dos armas largas que transportaban para empezar a huir del lugar.
El acompañante logró escapar al introducirse a una zona boscosa, no así el conductor, el cual fue detenido por los guardacostas e identificado como de apellido Mora, quien no cuenta con ningún tipo de permiso de portación de arma.
Tras una búsqueda por la zona, los oficiales del Guardacostas lograron encontrar una escopeta de doble cañón, sin serie y sin municiones, así como una carabina calibre 22 provista de nueve municiones.
Al igual que el arma decomisada el viernes, estas últimas tampoco contaban con ningún registro en el país.
Tras solicitar la dirección funcional del fiscal de turno de Nicoya, este ordenó el decomiso de las tres armas y la aprehensión de los dos sospechosos a fin de remitirlos a la orden de la citada fiscalía donde podrían ser procesados por el delito de portación ilegal de arma permitida.